"Mi oficina ha recibido informes de que las fuerzas malienses pueden haber cometido abusos en los últimos días en el centro de Mali", señaló Bensouda en un comunicado.
En él, urgió a "las autoridades de Mali a poner fin inmediatamente a los supuestos abusos y a (...) investigar y perseguir a los responsables de los supuestos crímenes".
"Recuerdo a todas las partes del conflicto en curso en Mali que mi oficina tiene jurisdicción sobre todo crimen grave cometido en territorio de Mali desde enero de 2012", señaló la fiscal gambiana, que el pasado año sustituyó en el cargo al argentino Luis Moreno Ocampo.
Bensouda insistió en que "todos los supuestos responsables de crímenes graves deben comparecer ante la Justicia".
La ONU ha informado recientemente de que ha documentado "numerosas violaciones de los derechos humanos" en Mali, incluidas ejecuciones extrajudiciales, violaciones y torturas, tanto por parte de los grupos islámicos armados del norte como de las fuerzas gubernamentales.
Esas violaciones ocurren de manera generalizada desde enero de 2012, especialmente en el norte controlado por los grupos radicales Movimiento Nacional de Liberación del Azawad, Al Qaeda en el Magreb Islámico, Ansar Dine y Monoteísmo y Yihad en África Occidental, según la ONU.
La ONU también constató "graves violaciones de los derechos humanos en las zonas controladas por el Gobierno de Mali, incluidas ejecuciones extrajudiciales y al menos 21 desapariciones forzadas tras el fallido golpe de Estado del 30 de abril".
Además, en las últimas semanas varias organizaciones han expresado su preocupación por los posibles actos de venganza contra comunidades árabes y tuareg conforme las fuerzas malienses y francesas avanzan hacia el norte del país.
